Con el triunfo electoral en julio del 2018, el partido MORENA<\/span>1<\/sup><\/a><\/span> En este orden de ideas, seg\u00fan la literatura que se consulte sobre reg\u00edmenes pol\u00edticos del siglo XX se categorizar\u00e1n entre: reg\u00edmenes liberales o autoritarios, presidencialistas, parlamentarios, aristocr\u00e1ticos, totalitarios o republicanos, por nombrar algunos. Las configuraciones y transformaciones de los estados naci\u00f3n, se identifican seg\u00fan la forma de gobierno que un pa\u00eds tiene; para el caso de M\u00e9xico este asumi\u00f3 un r\u00e9gimen pol\u00edtico monopartidista de corte presidencialista (Woldenberg, 2014), y desde la configuraci\u00f3n del estado revolucionario la relaci\u00f3n M\u00e9xico-Estados Unidos estuvo atravesada por medidas unilaterales por parte del pa\u00eds anglosaj\u00f3n. Por ejemplo, durante la prohibici\u00f3n temprana de la mariguana en EUA los \u201cmexicanos\u201d fueron parte de la propaganda negativa para su eliminaci\u00f3n del mercado abierto, y m\u00e1s tarde desde finales de los a\u00f1os 1960 y principios los a\u00f1os 1970, durante la era Nixon y la primera \u00e9poca de la \u201cguerra contra las drogas\u201d, se acrecentaron las medidas unilaterales, pasando por la \u00e9poca de la certificaci\u00f3n y la cooperaci\u00f3n de la iniciativa M\u00e9rida, donde este tipo de intercambios no se podr\u00edan comprender, en buena manera por el ambiente pol\u00edtico de la \u00e9poca y los reg\u00edmenes pol\u00edticos tanto de M\u00e9xico como de Estados Unidos.<\/p>\n En particular, para identificar las pol\u00edticas de drogas contempor\u00e1neas como sistema de control mexicano, tendr\u00edamos que partir del r\u00e9gimen pol\u00edtico autoritario presidencialista posrevolucionario, como antecedente menos pr\u00f3ximo con una duraci\u00f3n de casi cincuenta a\u00f1os, seguido de un per\u00edodo de desdibujamiento de las instituciones del Estado, en el marco de la pol\u00edtica neoliberal y un reordenamiento econ\u00f3mico, hasta la flexibilizaci\u00f3n presidencial d\u00f3nde la transici\u00f3n democr\u00e1tica reconfigur\u00f3 las relaciones pol\u00edticas y algunas condicionantes estructurales respecto a los poderes en el pa\u00eds, lo cual reorden\u00f3 los equilibrios entre los poderes, por ejemplo el legislativo y judicial frente al ejecutivo, o los grupos criminales frente algunos los poderes locales y federales.<\/p>\n Los reg\u00edmenes globales y las pol\u00edticas internacionales, han sido un esquema de cooperaci\u00f3n internacional donde el Estado Mexicano ha tenido que manejar el control de drogas como un eje particular con una fuerte influencia norteamericana, comenzando desde, la cabeza el Ejecutivo y al menos desde los a\u00f1os cuarenta con agencias como la Procuradur\u00eda General de la Rep\u00fablica, la Direcci\u00f3n Federal de Seguridad, seguido de la Polic\u00eda Judicial Federal, la Agencia Federal de Investigaciones, la Polic\u00eda Federal y desde los primeros ejercicios de control en los a\u00f1os 60 las fuerzas armadas han tenido un papel ciertamente definitorio con ejercicios como la operaci\u00f3n C\u00f3ndor y la erradicaci\u00f3n de cultivos, detenci\u00f3n de traficantes y destrucci\u00f3n de drogas (Enciso, 2009).<\/p>\n En este orden de ideas, las relaciones sobre la agenda conocida como \u201cnarc\u00f3tica\u201d entre M\u00e9xico y Estados Unidos por lo menos de las \u00faltimas tres d\u00e9cadas (Toro, 1995) no se podr\u00edan explicar sin enmarcar la relaci\u00f3n de interdependencia con Estados Unidos, as\u00ed como la transformaci\u00f3n del papel de M\u00e9xico en los organismos multilaterales, y las responsabilidades adquiridas tanto por apoyos econ\u00f3micos como parte de una agenda de seguridad hemisf\u00e9rica del pa\u00eds vecino.<\/p>\n Desde 1970, el abuso de sustancias como cannabis, amapola y el arbusto de coca agudiz\u00f3 el debate sobre el control legal de drogas. Por ejemplo: a partir de 1961 (UNODC, 1999), se configura la actual era de prohibici\u00f3n global de las drogas, con la instauraci\u00f3n y futura ratificaci\u00f3n de las convenciones internacionales por parte de varios pa\u00edses miembros de las Naciones Unidas, las cuales han sido mecanismos de intercambio y negociaciones diplom\u00e1ticas (Enciso, 2010).<\/p>\n Particularizando entonces, que el campo de las pol\u00edticas de drogas ha sido un \u00e1rea compleja en la tensa trama bilateral entre Estados Unidos y M\u00e9xico en los \u00faltimos 40 a\u00f1os, desde la \u00e9poca de la certificaci\u00f3n en los a\u00f1os ochenta hasta la iniciativa M\u00e9rida y las nuevas medidas impuestas en la administraci\u00f3n Trump, mas apegadas a cuestiones migratorias y un agenda pol\u00edtica nacional proteccionista, el presidente norteamericano, utilizando las debilidades del Estado mexicano, identific\u00f3 un recurso de negociaci\u00f3n mediante la securitizaci\u00f3n con el despliegue de la Guardia Nacional para control migratorio, dicho esto, M\u00e9xico, ha tenido que sortear distintos desaf\u00edos, diplom\u00e1ticos y compromisos jur\u00eddicos al hacer frontera con el mayor mercado de drogas en el mundo.<\/p>\n Encontramos entonces a la seguridad como el principal eje de la relaci\u00f3n bilateral entre M\u00e9xico y Estados Unidos, marcada hasta hace algunos a\u00f1os por una agenda de seguridad \u201cnarc\u00f3tica\u201d con un enfoque hacia el crimen organizado y tr\u00e1fico il\u00edcito de drogas. Por lo que la cooperaci\u00f3n se basaba en el financiamiento, apoyo t\u00e9cnico y log\u00edstico, lo cual ha colocado a M\u00e9xico como un dependiente de esta relaci\u00f3n, as\u00ed como hacer veces de juez y parte en los chantajes de las decisiones de las agencias norteamericanas como, el Departamento de Justicia, el FBI y la DEA, incluso el congreso o el presidente en turno.<\/p>\n Por su parte, el \u00e1mbito de cooperaci\u00f3n bilateral concierne a la colaboraci\u00f3n institucional en t\u00e9rminos de salud y prevenci\u00f3n donde instrumentos como la primera Encuesta sobre Adicciones a finales de los a\u00f1os 80 estuvo financiada y supervisada por agencias de los Estados Unidos como el Instituto Nacional para el abuso de Drogas (NIDA). En este sentido, durante las \u00faltimas administraciones y resultado de los acuerdos de la iniciativa M\u00e9rida se ha impulsado la capacitaci\u00f3n de jueces y la instalaci\u00f3n de cortes con el modelo de justicia terap\u00e9utica.<\/p>\n La cooperaci\u00f3n derivada de la iniciativa M\u00e9rida fue precedida por varios a\u00f1os de tensiones diplom\u00e1ticas, en este sentido, el componente de intercambio judicial con las extradiciones se cumpliment\u00f3 en la \u00e9poca de la transici\u00f3n democr\u00e1tica sugiriendo que en la balanza de la interdependencia que M\u00e9xico tiene hacia el pa\u00eds del norte, existe una fuerte carga de compromisos y mediante la agenda particular del expresidente Calder\u00f3n se logr\u00f3 introducir una l\u00f3gica medi\u00e1tica, un terreno de incursi\u00f3n armada y de tintes b\u00e9licos al crimen organizado.<\/p>\n A ra\u00edz de las graves consecuencias de la implementaci\u00f3n de la seguridad armada como pol\u00edtica de contenci\u00f3n criminal en el sexenio de Felipe Calder\u00f3n, en 2012 durante su \u00faltimo discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, en un ambiente de pluralismo pol\u00edtico, el ex presidente propuso, junto con el gobierno de Colombia y Guatemala en una declaraci\u00f3n conjunta, adelantar la sesi\u00f3n especial sobre drogas.<\/p>\n En este clima, la legalizaci\u00f3n en la uni\u00f3n americana de la mariguana en estados como Colorado y Washington, la salida de Bolivia de los tratados internacionales y re introducci\u00f3n con reservas y la regulaci\u00f3n estatal de la cannabis en Uruguay, al menos en el discurso y en las c\u00fapulas del sistema de control lograron que a nivel internacional el debate que llevaba en un impasse, fuera retomado con fuerza, aunque durante al administraci\u00f3n de Enrique Pe\u00f1a Nieto 2012-2018 la agenda internacional se intent\u00f3 \u201cdesnarcotizar\u201d y minimizar tratando de manera cuidadosa la responsabilidad de estructurar un dialogo interno rumbo a la discusi\u00f3n de un nuevo abordaje a las pol\u00edticas de drogas (Collins, 2017).<\/p>\n Al respecto, la flexibilizaci\u00f3n del sistema de control sobre marihuana a nivel global y la decisi\u00f3n de la Suprema Corte al declarar inconstitucional la prohibici\u00f3n absoluta de la marihuana en 2015 (Aguinaco, 2017), aunado con el clima preparatorio de la UNGASS 2016 y en consecuencia de imagen derivada de las crisis de corrupci\u00f3n y violencia las cuales desde el a\u00f1o 2014 fueron cubiertas por los titulares internacionales tales como: la \u201cCasa Blanca, los 43 de Ayotzinapa, Tlatlaya (Meyenberg & Aguilar, 2015) y otros ejemplos como el escape del \u201cChapo Guzm\u00e1n\u201d quiz\u00e1 permitieron un cambio en el enfoque y se trasladaron a promover declaraciones, discursos e iniciativas respecto a una reforma sobre leyes de drogas en M\u00e9xico encabezadas por el poder Ejecutivo (Stargardter, 2016).<\/p>\n De manera paralela la crisis migratoria de Centro Am\u00e9rica y el Tri\u00e1ngulo Norte resultado de las guerras de los a\u00f1os ochenta, M\u00e9xico ha sido protagonista lejano de ambos casos y por su parte la aproximaci\u00f3n abiertamente belicista de la llamada \u201cguerra contra las drogas\u201d \u201coficial mexicana\u201d ha coincidido con la reconfiguraci\u00f3n de los mercados de drogas como la coca\u00edna, la hero\u00edna, los estimulantes anfetam\u00ednicos sint\u00e9ticos, la reconfiguraci\u00f3n y expansi\u00f3n de grupos de crimen organizado trasnacional y la captaci\u00f3n de pandillas locales y el apostamiento de t\u00e9cnicas mafioso-paramilitares y de contra insurgencia, parecidas y con efectos adversos parecidos a los conflictos armados no internacionales y las guerras de baja intensidad.<\/p>\n Particularizando en el r\u00e9gimen pol\u00edtico y su transformaci\u00f3n, a partir del 1 de julio de 2018 en M\u00e9xico se ha denominado la \u201cCuarta Transformaci\u00f3n\u201d: a un cambio de r\u00e9gimen pol\u00edtico y seg\u00fan el glosario de conceptos pol\u00edticos, un r\u00e9gimen pol\u00edtico puede ser considerado como: el conjunto de instituciones que regulan la lucha por el poder y su ejercicio, y de los valores que sustentan esas instituciones. Es la estructura organizadora del poder, que establece los criterios de selecci\u00f3n de los integrantes de la clase dirigente y asigna los roles en ella. Tambi\u00e9n es el conjunto de normas y procedimientos para el acceso y el manejo del poder, por lo que es dif\u00edcil establecer que realmente existe un cambio de r\u00e9gimen pol\u00edtico y m\u00e1s bien podr\u00eda estarse gestando una reconfiguraci\u00f3n del poder pol\u00edtico.<\/p>\n En esta cuesti\u00f3n, una de las teor\u00edas m\u00e1s extendidas respecto la actual las crisis de inseguridad, es la que propuso Luis Astorga (2004,2012:2004,2015) , donde sugiere que en M\u00e9xico durante el cambio de r\u00e9gimen de partido \u00fanico de corte autoritario, hacia un esquema de transici\u00f3n democr\u00e1tica y reordenamiento de los poderes, fue un factor para que los grupos de traficantes supeditados al poder pol\u00edtico se reconfigurar\u00e1n y tuvieran distintas particularidades, aunadas a una fuerte agenda securitaria norteamericana que se transform\u00f3 radicalmente desde los atentados del 11 de septiembre de 2001, donde la seguridad M\u00e9xico – Estados Unidos se descuid\u00f3 y el gobierno mexicano, se enfoc\u00f3 en perseguir peque\u00f1os o algunas facciones de traficantes o simplemente a los consumidores.<\/p>\n Es por esto, que una particularidad en las pol\u00edticas de drogas cruza por el control y contenci\u00f3n del tr\u00e1fico il\u00edcito, una de las particularidades de los actuales tiempos, ser\u00eda que los traficantes mexicanos a ra\u00edz del cierre del caribe, tuvieron un afianzamiento como intermediarios directos entre los mercados de la coca\u00edna sudamericana, y el mercado anglo, d\u00e1ndole un componente trasnacional a los grupos mexicanos, seguido de un cambio en la fuerza armada con t\u00e1cticas paramilitares y contra insurgentes, d\u00e1ndose una especie de \u201cmilitarizaci\u00f3n\u201d de sus actividades y en algunos casos la migraci\u00f3n de un tipo de delitos hacia otros.<\/p>\n En este clima de ajustes, se solidific\u00f3 la \u201camericanizaci\u00f3n\u201d de las pol\u00edticas de drogas globales, como la internacionalizaci\u00f3n de la DEA, las operaciones de la CIA y los acuerdos gubernamentales entre el Departamento de Justicia y las estructuras locales judiciales, la colaboraci\u00f3n para el entrenamiento capacitaci\u00f3n y apoyo econ\u00f3mico como el plan Colombia y la iniciativa M\u00e9rida re-configuraron las relaciones entre M\u00e9xico y Estados Unidos respecto al control de drogas, d\u00e1ndose en los a\u00f1os 90 una de las primeras detenciones de militares en M\u00e9xico envueltos en tramas de corrupci\u00f3n y apoyo a grupos de traficantes.<\/p>\n A partir de los \u00faltimo a\u00f1os de gobierno de Vicente Fox y durante el periodo Calder\u00f3n, consecuente con el reordenamiento del r\u00e9gimen pol\u00edtico o primera transici\u00f3n, los homicidios fueron paulatinamente dejando la tendencia a la baja y comenzaron un crecimiento sostenido, seg\u00fan algunas teor\u00edas, derivadas de los operativos conjuntos por parte de Polic\u00eda Federal y Militares en el combate armado al crimen organizado, en este orden de ideas, se empezaron a extender y generalizar casos de violencia espectacular, como descabezamientos y uso del cuerpo muerto a manera de advertencia en lugares p\u00fablicos, se dejaban mensajes en mantas o carteles muy particulares la v\u00eda p\u00fablica, uso de blogs, videos y comunicados con soporte audiovisual para amenazar enemigos establecer esquemas de propaganda como la intimidaci\u00f3n y el adoctrinamiento, incluso hubo denominaciones como \u201cnarco terrorismo\u201d utilizadas por la Secretaria de Estado Hilary Clinton en 2009 despu\u00e9s de varias explosiones contra civiles y ataques a los consulados norteamericanos.<\/p>\n Uno de los principales retos que enfrentaron tanto polic\u00edas locales como fuerzas federales durante la \u201cguerra contra las drogas mexicana\u201d o \u201cguerra de seis a\u00f1os\u201d era el uso de \u201carmas\u201d de grueso calibre, el reclutamiento masivo, en algunas ocasiones forzado, fugas de centros penitenciarios, masacres y un aumento en la violencia para dominar los mercados locales de drogas.<\/p>\n Por lo que uno de los principales planes y propuestas de campa\u00f1a de L\u00f3pez Obrador y MORENA eran poner en orden el desastre creado por la persecuci\u00f3n del crimen y se propusieron durante la campa\u00f1a electoral de 2017 y 2018 esquemas de amnist\u00edas, justicia transicional y en el mejor de los casos opciones regulatorias y una estrategia integral de construcci\u00f3n de paz.<\/p>\n En este clima de adaptaciones, cambios en el poder de fuego y confrontaci\u00f3n de grupos de traficantes, as\u00ed como su infiltraci\u00f3n en algunas esferas del gobierno, el discurso pol\u00edtico y durante la campa\u00f1a electoral de la \u201cCuarta Transformaci\u00f3n\u201d, se prometi\u00f3 un eje de construcci\u00f3n de la paz que se basar\u00eda en la reconciliaci\u00f3n y la \u201c desmilitarizaci\u00f3n\u201d, parec\u00eda entonces que la propuesta de amnist\u00eda, y acelerar el andamiaje institucional para la regulaci\u00f3n por lo menos de la mariguana mediante iniciativas presentadas por ese partido e incluso de amapola, parec\u00edan horizontes pr\u00f3ximos realizables.<\/p>\n En virtud de ello, muchos ciudadanos dieron en su voto como una salida al conflicto armado, y social, incluso, fue declarada de manera formal: el fin de la Guerra por el presidente L\u00f3pez el 30 de enero de 2019, durante una conferencia de presa y por un lado seg\u00fan la informaci\u00f3n p\u00fablica disponible, pareciere que hay una desaceleraci\u00f3n en el n\u00famero de incautaciones de drogas il\u00edcitas, as\u00ed mismo las detenciones han sido menos espectaculares, y con la puesta en marcha de la Guardia Nacional, los objetivos se han trasladado respecto al combate armado de la inseguridad al control migratorio.<\/p>\n Por lo que respecta al \u00e1mbito de la salud y las pol\u00edticas de control de drogas han habido cambios poco significativos y en lo que respecta la forma de operaci\u00f3n respecto al discurso y pol\u00edticas p\u00fablicas de criminalizaci\u00f3n de las personas que usan drogas contin\u00faan de manera flagrante, donde la estigmatizaci\u00f3n tanto en el estrategia nacional de prevenci\u00f3n de adicciones, como en el plan nacional de desarrollo se sigue tomando como paradigma, un esquema negativo, persecutorio, paternalista y autoritario, donde se normaliza el v\u00ednculo entre consumo de drogas y violencia, como un binomio, as\u00ed mismo se sigue sin distinguir entre el uso abuso y dependencia a\u00fan y cuando, al menos en cannabis la Suprema Corte ha establecido criterios de jurisprudencia, respecto al auto provisionamiento y el libre desarrollo de la personalidad, en este sentido, por ejemplo la Fiscal\u00eda General de la Republica as\u00ed como las procuradur\u00edas locales como la de la ciudad de M\u00e9xico siguen publicando en sus redes sociales mensajes contrarios a las jurisprudencias respecto a la portaci\u00f3n de drogas o suministro de drogas, o vinculando el consumo de drogas con el delito.<\/p>\n Otro punto de inflexi\u00f3n en t\u00e9rminos de salud, es la falta de apoyos econ\u00f3micos y disminuci\u00f3n de programas de co-inversi\u00f3n debido al recorte presupuestal derivado del plan econ\u00f3mico de austeridad, dichos programas eran llevados a cabo por organizaciones de la sociedad civil por ejemplo para programas de reducci\u00f3n de da\u00f1os de prevenci\u00f3n de la violencia o prevenci\u00f3n de adicciones o tratamiento, en este mismo orden de ideas a\u00fan no es cuantificable pero quiz\u00e1 el rubro de la investigaci\u00f3n cl\u00ednica y cient\u00edfica tambi\u00e9n vaya a tener mermas significativas con los recortes presupuestales en \u00e1reas como las ciencias sociales y ciencias m\u00e9dicas que estudien o investiguen cuestiones sobre drogas.<\/p>\n Existen paradojas, pues, a pesar de que el partido en el gobierno prometi\u00f3 un cambio, en la realidad el enfoque sigue siendo represivo y el discurso no se empata con la realidad. No parece estar dentro de las prioridades estimular y aprobar las iniciativas federales y locales propuestas, como la legislaci\u00f3n prometida sobre cannabis, la cual ha sido anunciada hasta finalizar el per\u00edodo de sesiones en octubre, a\u00fan y, cuando MORENA cuenta con la mayor\u00eda en ambas c\u00e1maras y ser\u00eda relativamente sencillo introducir una iniciativa y votarla en consenso, hasta el momento no parece un horizonte cercano.<\/p>\n Por otro lado, se han publicado documentos planes y programas que abarcan temas sobre el control de drogas, dentro de los que destaca la estrategia nacional de prevenci\u00f3n de adicciones, en la cual no se presentaron programas de fortalecimiento del tratamiento o la prevenci\u00f3n y promoci\u00f3n de la salud mental con una conceptualizaci\u00f3n de pol\u00edtica p\u00fablica centrada en las personas que han decidido utilizar sustancias psicoactivas, como la reducci\u00f3n de da\u00f1os, y s\u00f3lo se habla de la \u201cprevenci\u00f3n\u201d.<\/p>\n Por su parte, los grandes aliados del gobierno son agentes que tienen una larga trayectoria como aliados del sistema de control impositivo y apegados a las nociones \u201cprohibicionistas\u201d tales como los Centros de Integraci\u00f3n Juvenil, Alcoh\u00f3licos An\u00f3nimos o grupos de ayuda mutua de tipo religiosos. Por lo que se sigue argumentando una especie de patologizaci\u00f3n reconociendo que si bien las \u201cadicciones\u201d son una enfermedad, no se incluye todo el espectro de usuarios, pues no todos los casos tienen que ver con el abuso o desorden en el uso. Adem\u00e1s, en de las campa\u00f1as de prevenci\u00f3n se sigue generalizado un sistema donde no se incluye y se socavan las libertades ya incluidas en las jurisprudencias como la autonom\u00eda de las personas, el derecho a la salud y se delega el uso de sustancias psicoactivas al ambiente patol\u00f3gico, criminal o desviado.<\/p>\n Mas a\u00fan, existen signos de que hay una gran resistencia para llevar a cabo las transformaciones que se hab\u00edan prometido en el rubro de las pol\u00edticas de drogas nacionales, aunado tambi\u00e9n a que existe una percepci\u00f3n, al menos por autoridades norteamericanas, de que existe un abandono de la agenda de seguridad por parte de M\u00e9xico en t\u00e9rminos de tr\u00e1fico de drogas. Por lo que la violencia y re organizaci\u00f3n de grupos de traficantes pueden mermar tanto los planes como los avances respecto al cambio en la aplicaci\u00f3n de nuevos abordajes al esquema punitivo. Pues incluso en la nueva normativa de la Guardia Nacional se establece que la nueva fuerza podr\u00e1 perseguir la tenencia de sustancias il\u00edcitas.<\/p>\n A\u00fan es prematuro sacar conclusiones y si bien podr\u00edamos tener una visi\u00f3n positiva del camino emprendido por la nueva administraci\u00f3n, en la pr\u00e1ctica el proteccionismo y paternalismo con el cual se han expresado las personas encargadas de establecer los planes y programas, donde por ejemplo, se argumenta que el uso de drogas es un intento por encontrar salidas a la realidad, pareciera no haber un cambio o transformaci\u00f3n en las actitudes. M\u00e1s a\u00fan, sugiero, que el mismo sistema fue trasladado de una administraci\u00f3n a otra.<\/p>\n Pareciera entonces, que los esquemas de discriminaci\u00f3n y violaci\u00f3n de derechos humanos en nombre de la salud como las denominadas “cortes de drogas” est\u00e1n en consolidaci\u00f3n, y por otra parte, la premisa falsa depositada en que con una \u201cregulaci\u00f3n\u201d de \u201cx\u201d o \u201cy\u201d sustancias ser\u00e1n un catalizador de la violencia o traer\u00e1n paz, tambi\u00e9n es ingenuo, incluso poco popular en la opini\u00f3n p\u00fablica. Creer que s\u00f3lo con una regulaci\u00f3n de una droga se construir\u00e1 un andamiaje institucional y corregir\u00e1 d\u00e9cadas de procesos adversos es por dem\u00e1s osado, incluso es contraproducente fomentar este tipo de premisas. Por lo que construir un ambiente de reconciliaci\u00f3n tambi\u00e9n deber\u00eda pasar por una inversi\u00f3n may\u00fascula en la prevenci\u00f3n, el tratamiento y adem\u00e1s en revisar los da\u00f1os ocasionados por la guerra contra las drogas, de las cuales se intentaron llevar a cabo foros que terminaron de una manera abrupta e incluso la oficina para atenci\u00f3n a v\u00edctimas ha sufrido un grave recorte presupuestal.<\/p>\n Y aunque en la ret\u00f3rica el presidente haya dado por terminada la \u201cguerra contra las drogas\u201d, las din\u00e1micas y los traficantes no han disminuido ni su nivel de violencia, ni el poder de fuego, por el contrario han permeado m\u00e1s el tejido social y confrontado de manera directa a las autoridades.<\/p>\n Es un reto may\u00fasculo establecer mecanismo de integraci\u00f3n a la cultura de la legalidad y la rendici\u00f3n de cuentas los temas concernientes a la guerra contra las drogas en M\u00e9xico, pero deber\u00eda ser imprescindible establecer los criterios para crear una nueva narrativa respecto a la afrenta que tiene el Estado mexicano, en perspectiva de una crisis generalizada en t\u00e9rminos de derechos humanos y empatarla con las nuevas necesidades como el control migratorio, sin descuidar las promesas de campa\u00f1a y generar un consenso dentro del mismo partido dominante para acelerar sus mismas propuestas.<\/p>\n Las reflexiones est\u00e1n servidas, bastar\u00eda comentar que a\u00fan queda un largo camino por recorrer y mediante la identificaci\u00f3n de las principales virtudes y desventajas del actual momento, se podr\u00e1 construir un verdadero cambio de r\u00e9gimen que trasversalmente toque a las pol\u00edticas de drogas con un enfoque m\u00e1s justo, de reparaci\u00f3n del da\u00f1o.<\/p>\n <\/p>\n Aguilar, R., & Casta\u00f1eda, J. (2009). El narco: la guerra perdida. M\u00e9xico<\/em>: Punto de lectura. Astorga, L. (2001). The limits of Anti-Drug Policy in Mexico.<\/em> International Social Science Journal, 427-434. Aguinaco, A. B. (2017). Cannabis for personal use in the Supreme Court of Mexico: Legal case and potential for policy change.<\/em> International Journal of Drug Policy, 9\u201310.<\/p>\n Atuesta, L. (2014). La pol\u00edtica de drogas en M\u00e9xico 2006-2012: an\u00e1lisis y resultados de una pol\u00edtica prohibicionista.<\/em> Aguascalientes: CIDE. Bewley-Tylor, D. (2012). International Drug Control.<\/em> Consensus Fractured. Cambridge: Cambridge University Press.<\/p>\n Bobbio et al (1997). Diccionario de Pol\u00edtica<\/em>. M\u00e9xico D.F.: Siglo XXI.<\/p>\n Boyer, J. F. (2001). La guerra perdida contra las drogas.<\/em> M\u00e9xico: Grijalbo.<\/p>\n Collins, J. (2014). Ending the drug wars.<\/em> London: LSE, London School of Economics and Political Science. 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\nse ha ido convirtiendo en una nueva estructura de un partido dominante mediante alianzas heterog\u00e9neas y plurales, siendo una figura autocr\u00e1tica presidencial, la base principal del ideario y funcionamiento pol\u00edtico hasta el momento. As\u00ed mismo, existe una reconfiguraci\u00f3n pol\u00edtica y un desmantelamiento institucional de ciertas \u00e1reas administrativas, por lo que establecer un corte temprano es arriesgado, pero se podr\u00edan identificar tendencias en el corto plazo, algunas de car\u00e1cter novedoso y otras como parte heredada de la agenda propuesta desde la campa\u00f1a.<\/p>\nLa guerra contra las drogas en M\u00e9xico; del silencio al estruendo.<\/h2>\n
<\/h2>\n
Guerra global, impacto local<\/h2>\n
De la campa\u00f1a al cambio de r\u00e9gimen y prioridades<\/h2>\n
Cuarta transformaci\u00f3n el impasse en la reforma sobre drogas<\/h2>\n
\nBibliograf\u00eda:<\/h3>\n
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\nPunto de lectura.<\/p>\n
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\ndulce y manteca. Blog de Jos\u00e9 Woldenberg from https:\/\/josewoldenberg.nexos.com.mx\/?p=94<\/a><\/p>\n