Journal of Multidisciplinary Studies in Human Rights & Science (JMSHRS)
Volume 5, Issue 5, December 2023 | SDGs: 10 | 16 | 17 | #RethinkProcess
ORIGINAL SOURCE ON: https://knowmadinstitut.org/journal/
DOI: 10.5281/zenodo.10397549
Journal of Multidisciplinary Studies in Human Rights & Science (JMSHRS)
Volume 5, Issue 5, December 2023 | SDGs: 10 | 16 | 17 | #RethinkProcess
ORIGINAL SOURCE ON: https://knowmadinstitut.org/journal/
DOI: 10.5281/zenodo.10397549
Volume 5, Issue 5, December 2023 | SDGs: 10 | 16 | 17 | DOI: 10.5281/zenodo.10397549
Relaciones Bilaterales De El Salvador Con Estados Unidos En El Período 2014-2023
Armando Briñis Zambrano*
ES | Abstract:
La política exterior constituye un mecanismo institucional de un Estado, formada por un conjunto de acciones, que, de manera analizada, equilibrada y articulada, permite la relación con otros países. Esta política no puede estar separada de la política nacional doméstica de un Estado y utiliza, como herramienta fundamental para su ejecución, la diplomacia.
Debe estar elaborada tomando en cuenta los objetivos e intereses de cada Estado y la sociedad en general. Es decir, enfocada en objetivos concretos de cooperación mutua, establecimiento de acuerdos comerciales y también en objetivos más abstractos, como las políticas a nivel bilateral y multilateral.
Desde esa perspectiva, los gobiernos de turno elaboran su política exterior según sus intereses y para responder al comportamiento de otros actores internacionales, o bien pueden actuar de manera general con sus principios; es decir, por medio de la política exterior, mantener o aumentar su presencia e influencia en la política internacional, ya sea de forma favorable o menos favorable con relación a otros actores internacionales, siempre en los marcos y principios de derecho internacional público.
En ese contexto, en el presente trabajo se desarrollan, desde un enfoque académico, las relaciones político-diplomáticas entre El Salvador y Estados Unidos en el período del 2014 a septiembre de 2023, desde la perspectiva del derecho internacional y la historia diplomática de El Salvador. Es el momento en que ocurre un cambio de gobierno, de una administración supuestamente apegada a preceptos de la izquierda latinoamericana, a un gobierno que rompe con el statu quo marcado por un bipartidismo de corte tradicional que por treinta años mantuvo el poder. Asimismo, se toman como relevantes las últimas acciones del Estado Salvadoreño, sus órganos ejecutivos, judicial y legislativo, permeados de un cambio en esa política exterior dependiente de los Estados Unidos de América, hasta una permuta de paradigma opuesto a las decisiones de esta potencia mundial.
Palabras Clave: Política exterior, relaciones diplomáticas, derecho internacional público, ODS 10, ODS 16, ODS 17.
EN | Abstract:
Foreign policy constitutes an institutional mechanism of a state, formed by a set of carefully analyzed, balanced, and articulated actions that facilitate relations with other countries. This type of policy is intrinsically linked to a state's domestic national policy and utilizes diplomacy as a fundamental tool for its implementation. It must be formulated considering the goals and interests of both the state and its wider society. This encompasses both specific objectives, such as cooperation and trade agreements, and broader engagement in bilateral and multilateral policies. From this perspective, governments develop their foreign policy based on a combination of factors: their own interests, the actions of other international actors, and their adherence to guiding principles. Foreign policy can thus serve to maintain or increase a state's presence and influence in international politics, whether through alliances or divergence from other actors, all within the framework of public international law. Drawing from an academic approach, this research analyzes the political-diplomatic relations between El Salvador and the United States (USA) from 2014 to September 2023, examining them through the lens of international law and diplomatic history from a Salvadoran perspective. This period witnessed a significant shift in government, from an administration aligned with Latin American values to one challenging the status quo of a traditional two-party system that held power for three decades. Furthermore, the research explores how the Salvadoran state's recent actions, particularly across its executive and legislative branches, reflect a departure from a foreign policy heavily reliant on the United States, suggesting a potential shift towards paradigms that may not always align with the decisions of this global power.
Keywords: foreign policy, diplomatic relations, public international law, SDG 10, SDG 16, SDG 17.
En las relaciones internacionales actuales asistimos a cambios geoestratégicos trascendentales. Estados Unidos, la otrora potencia con un poderío unilateral, ha perdido su etiqueta de potencia con predominio absoluto en las relaciones planetarias, título obtenido después de la desaparición de la Union Soviética en diciembre de 1991.
Hoy, China y su alianza con Rusia inclinan la balanza económica y militar a su favor, a la vez que asistimos a una Nueva Guerra Fría y Ucrania se ha convertido en el campo de enfrentamiento. Territorio lejano de Estados Unidos, como siempre han querido los políticos estadounidenses; pero cerca de los misiles rusos, como saben los militares de este país.
Desde la desaparición de la Unión Soviética, hemos asistido a la expansión de la OTAN hacia el este de las fronteras rusas, pese a las promesas de occidente de que eso nunca ocurriría. Por su parte, Estados Unidos comenzó a retirarse de los tratados de control de armas comenzando una nueva espiral de la irracional y peligrosa carrera armamentística, rompiendo los acuerdos básicos que habían puesto fin a la Guerra Fría. La más significativa fue la decisión de retirarse del Tratado sobre Misiles Antibalísticos (Tratado ABM por sus siglas en inglés), piedra angular de la serie de acuerdos que frenaron durante algún tiempo la carrera nuclear.
En el caso de Ucrania, la intromisión estadounidense es un hecho, al apoyar un golpe de estado que cambió el gobierno ucraniano en 2014, un procedimiento que normalmente no se considera coherente con el Estado de derecho o la gobernanza democrática al estilo occidental, además de tener el soporte interno de grupos reaccionarios pro-nazis banderistas. En esta espiral de violencia en las relaciones internacionales, giran todos los países del mundo y, por supuesto, las relaciones de El Salvador con los Estados Unidos.
Las relaciones entre El Salvador y Estados Unidos han sido históricamente fundamentales para el primero. Estas relaciones abarcan una amplia gama de áreas, desde la política y la economía hasta la seguridad y la cultura. En este artículo, realizado a partir del informe de investigación del caso de estudio, exploraremos la importancia de estas relaciones, destacando su evolución a lo largo del tiempo y su impacto en ambas naciones. Estas relaciones han experimentado diversas etapas a lo largo de la historia. En el siglo XIX, El Salvador buscó el reconocimiento diplomático de Estados Unidos, que finalmente se logró en 1863. Durante la Guerra Fría, el país centroamericano se vio envuelto en conflictos internos, y Estados Unidos desempeñó un papel importante al proporcionar apoyo militar y financiero a varios gobiernos salvadoreños militar. Esto tuvo un impacto significativo en la política interna y la situación conflictiva de la región.
Las relaciones entre El Salvador y Estados Unidos son de suma importancia para ambos países, especialmente para el primero, donde viven cerca de tres millones de salvadoreños con estatus legal o ilegal.
A lo largo de la historia, estas relaciones han evolucionado y han abarcado una variedad de áreas, desde lo político y económico hasta lo social y lo cultural. La cooperación económica y comercial, así como las remesas de los migrantes salvadoreños, ha impulsado la economía en El Salvador. Mientras, la cooperación en seguridad y migración ha abordado desafíos críticos que afectan a ambas naciones. A medida que el mundo sigue cambiando, es probable que la relación continúe adaptándose y desarrollándose en nuevas direcciones, manteniendo su relevancia para el futuro.
El contexto temporal analizado es el periodo del 2014 a principios del 2023, espacio que se puede caracterizar como de cambios, en el que el sistema político de El Salvador consolidado desde los Acuerdos de Paz que pusieron fin a la Guerra Civil hasta el 2014, las relaciones político-diplomáticas con los Estados Unidos de América para El Salvador revisten una gran jerarquía, que requiere de reflexiones con vistas a crear un pensamiento crítico en la sociedad salvadoreña.
En esta lógica es que la presente investigación pretende ser una herramienta para el sector académico y tomador de decisiones, en la elaboración de insumos con el fin de implementar políticas públicas encaminadas al aprovechamiento de los intereses nacionales efectuados por la política exterior.
En esa línea, la presente investigación explora, desde un enfoque académico e histórico, con base a hechos, las relaciones que han caracterizado a la política exterior de El Salvador con su mayor socio comercial a la fecha, Estados Unidos. De ahí que el contexto temporal investigado es el momento del inicio del período presidencial en 2014 (Sánchez Cerén) hasta donde se debilitaba el bipartidismo tradicional de los últimos treinta años en 2019 y se inicia el gobierno del presidente Bukele.
Asimismo, se pretende dar respuesta de acuerdo con un análisis y por medio de la investigación bibliográfica y de entrevistas a actores claves, sobre las últimas acciones tomadas en el Estado de El Salvador con relación a los poderes ejecutivos, judiciales y legislativos, transitando a un cambio en esa política exterior siempre dependiente de los Estados Unidos.
Se ha planteado el siguiente objetivo general de investigación: Identificar los elementos que marcan la dinámica de las relaciones diplomáticas entre El Salvador y Estados Unidos entre los años 2014 a septiembre de 2023.
El presente trabajo, fue realizado con un enfoque cualitativo adaptado a las características y necesidades de la investigación, teniendo en cuenta que se deriva de conocimientos y percepciones de la información que se obtuvo a partir de las técnicas aplicadas.
El enfoque cualitativo es el que “utiliza recolección de datos sin medición numérica para descubrir o afinar preguntas de investigación y puede o no probar hipótesis en su proceso de interpretación” (Hernández, 2003).
Se tomaron las respuestas de los discursos de los individuos desde la entrevista, para, posteriormente, realizar la interpretación, análisis y la relación en un contexto educativo, social y comparativo para establecer el fenómeno como tal.
El estudio puede considerarse como descriptivo en general, ya que se obtuvieron datos desde la narrativa y las palabras de los informantes claves entrevistados, realizándose las entrevistas a los internacionalistas, profesionales en derecho, analistas políticos y economistas de El Salvador que aceptaron participar.
Además, se realizó la investigación bibliográfica con el objetivo de reunir informaciones y datos que sirvieron de base para la construcción del trabajo propuesto. La información recabada, limitada al proyecto de investigación planteado, sirvió para profundizar, identificar contradicciones y respuestas a los supuestos establecidos.
La investigación bibliográfica se presenta como uno de los tipos de investigación que, en cuanto a los procedimientos técnicos, acostumbra a ser común el tratamiento de contenido; mientras la documental se diferencia de la bibliográfica, debido a que no incluye el análisis del contenido.
En este ámbito, se ha utilizado la investigación bibliográfica junto con la documental para obtener, de forma ordenada y secuencial de fuentes primarias y secundarias, información relevante para plasmar un capítulo sobre acciones principales que sustentan lo que se pretende con el presente trabajo.
La técnica utilizada para recoger la información fue la entrevista estructurada, teniendo en cuenta el tema de investigación, con la que se obtuvo las impresiones de los internacionalistas y profesionales salvadoreños conocedores de cómo se han comportado las relaciones político-diplomáticas entre El Salvador y Estados Unidos durante el periodo delimitado en la investigación. “La entrevista es una técnica de recogida de información que además de ser una de las técnicas más utilizadas en procesos de investigación, tiene ya un valor en sí misma” (Folgueiras, P, 2020). El muestreo utilizado para el presente trabajo de investigación fue el muestreo en cascada que también es llamado bola de nieve, que, como expone McMillan y Schumacher (2005):
Es una estrategia en la que cada sucesivo participante o grupo es designado por el participante o grupo precedente. El investigador elabora un perfil de las particularidades o de una característica concreta buscada y solicitada a los participantes que sugieran otras personas que se ajusten al perfil o posean esa particularidad (p.446).
Esta forma puede ser utilizada en los casos que los individuos buscados no están conformados en un grupo limitado, sino que están dispersos. Se decidió utilizar este muestreo debido a que para seleccionar los sujetos para aplicar la entrevista, debían ser profesionales en el tema investigado y de preferencia, con experiencia en la temática expuesta. Sin embargo, debido a que la investigación cualitativa se considera no rígida, se incluyeron en la entrevista a otros sujetos que se encontraban en el ámbito investigado.
Detalle de la Muestra:
Fuente: Elaboración propia.
A partir de la anterior tabla, se elaboró un perfil de los profesionales que se deseaba entrevistar, teniendo en cuenta la profesión, la experiencia, el rango de edad y el medio relacionado a la tématica investigada. En ese ámbito, como se estableció en el apartado de la metodológía de la investigación, se partió de entrevistados voluntarios a los cuales se les solicitó, con base al perfil, la recomendación de nuevos profesionales para entrevistarlos. Se obtuvo una definida y delimitada muestra intencional para obtener una capacidad adecuada de los resultados que aportaran una realidad y riqueza al trabajo en estudio.
Para presentar los hallazgos, se realizó como primer paso el analisis de los datos obtenidos del instrumento de la entrevista estructurada realizada a catorce profesionales salvadoreños con experiencia en la política exterior y expertos en las relaciones político diplomáticas entre El Salvador y Estados Unidos. Como segundo paso se realizó la reducción de la información obtenida a partir de la construcción de una matriz de lectura temática y codificación abierta, la que contiene tres objetivos específicos de la investigación, el establecimiento de las categorías y las preguntas realizadas con el propósito de establecer los hallazgos.
En dicha matriz se codificaron con colores las palabras claves de cada una de las respuestas y a partir de dicha información se formularon todas las posibles subcategorías en cada una de las categorías que se definieron.
En un tercer paso, se elaboró matriz resumida del sistema categorial para la recolección de la información, que contiene las categorías y la selección de subcategorías obtenidas de la comparación que se ejecutó de las respuestas a las preguntas relacionadas con los objetivos específicos plasmados.
Como cuarto paso, se desarrollaron matrices con cada una de las categorías y subcategorías seleccionadas y la definición de las mismas a partir de palabras propias del conocimiento adquirido para proceder a elaborar la interpretación de los datos cualitativos.
Para el análisis e interpretación de los datos cualitativos, se escogieron diferentes categorías atendiendo al tema y a los objetivos específicos de la investigación. En esa misma lógica, en cada categoría se definió una serie de subcategorías respondiendo a indicadores aportados por los distintos informantes y vinculados directamente con al tema principal.
Al interpretar los resultados de las personas entrevistadas se puede observar que hay distintas opiniones en cuanto a la política exterior en esta categoría, sin embargo, la mayoría expresó que observaron una dinámica de la política exterior con Estados Unidos positiva y estable en el período presidencial de 2014 a 2019, en donde no se mostró mayor diferencia en cuanto a las administraciones anteriores gobernadas por el partido ARENA.
Es consonancia con lo anterior, para algunos, incluso fue en esta administración donde se evidencia de mayor manera la cooperación internacional, a través de proyectos insignia, como el caso de FOMILENIO, que fue uno de los grandes avances que la administración del FMLN vendió, en relación con su amistad con el gobierno estadounidense.
En relación con esta subcategoría, algunos de los entrevistados dieron su punto de vista de cómo se presentó la prioridad del interés nacional según su apreciación para el nivel temporal investigado, manifestando que en parte del partido FMLN en el 2014-2019 no se mantuvo ese interés.
Mientras el gobierno del período de 2019-2023, según algunas respuestas de los entrevistados, se observa que se tiene como objetivo primordial defender el interés nacional en la defensa de sus decisiones políticas y actuar: “El gobierno actual parece hacer más gala de soberanía en sus decisiones, al margen de como pueda reaccionar los Estados Unidos.” (Entrevistado N° 12).
Considerada esta subcategoría como los nuevos socios con los cuales El Salvador ha fortalecido y consolidado sus relaciones bilaterales, o aquellos con quienes en el futuro lo pueden hacer.
Al realizar el análisis de lectura temática y codificación abierta de los resultados obtenidos, los entrevistados dejaron conocer que el cambio de la política exterior de El Salvador con los Estados Unidos dio un giro por las discrepancias en las relaciones con la administración de Biden.
En consecuencia, debido a la importancia de Estados Unidos como un socio en las relaciones de cooperación, migración y economía de El Salvador, se vio en la necesidad de tener una visión geopolítica distinta, entrando en el escenario otros países importantes de la esfera internacional, tal como se observa según las respuestas:
Evidentemente, ha habido un cambio de timón en la política exterior de El Salvador con Estados Unidos. Los intereses de El Salvador con dicho país persisten, pero el cambio de administración, con la llegada de Biden, generó una permuta para la visión de política exterior de la administración actual de El Salvador. En esa misma línea, el escenario de poder internacional actual, mete a China en política exterior de El Salvador, situación que afecta la influencia de Estados Unidos (Entrevistado N° 14).
Este es otro de los elementos importantes para comprender la categoría que se está analizando. Para algunos de los actores entrevistados, los choques ideológicos entre Estados Unidos siempre han existido, en algunas administraciones más evidentes que en otras. Por ejemplo, en el caso de la administración del FMLN, la percepción de los entrevistados es que mantuvieron detrás del telón esa confrontación. “Ante los ojos de la población se vio que mantuvieron relaciones estables entre Estados Unidos y El Salvador durante los gobiernos del FMLN, esto a pesar de que mantener algunas diferencias ideológicas con las políticas internas del partido”. (Entrevistado N°11)
Si bien es cierto que el análisis se encamina como premisa principal a la buena relación político-diplomática entre ambos países, también se interpreta el choque ideológico que Estados Unidos tendrá con un gobierno de corte izquierdista, y principalmente si fue un gobierno creado por un partido que viene de la guerrilla, con quien se combatió en el conflicto de la década de los 80 del siglo pasado.
El análisis surge al indagar la confrontación que se percibe entre las administraciones actuales, la cual probablemente no sea una causa ideológica, si no más de índole personal de los gobernantes. Esa interpretación se hará en la siguiente subcategoría a interpretar.
Las relaciones de las administraciones actuales de los gobiernos de El Salvador y Estados Unidos, notoriamente para la mayoría de los entrevistados, ha tenido un cambio en relación a la que dirigió la administración del FMLN con las administraciones de turno en el país norteamericano.
Algunos han considerado que la relación se volvió menos dinámica, se señalan recortes de cooperación, rompimiento con el clásico intervencionismo de Estados Unidos, y se consolidan las relaciones con otros países.
Más allá de los resultados obtenidos en las entrevistas, se debe comprender que la ejecución o la estrategia de implementar una política exterior, incluso su diseño, son acciones susceptibles de cambios ante la llegada de un nuevo gobierno. Los entrevistados, desde su campo y disciplina académica, lo han interpretado de esa manera.
La siguiente Categoría en la que se definieron cuatro subcategorías a analizar, está relacionada con el objetivo específico que busca establecer los resultados obtenidos de las relaciones político-diplomáticas entre El Salvador con Estados Unidos en el período temporalmente determinado (2014-2023).
La capacidad de Estados Unidos de tener una tradicional influencia y participación determinante en la mayoría áreas de interés de la geopolítica internacional, no es la excepción para El Salvador por varios aspectos, que según las respuestas de los entrevistados responden a la importancia de esta categoría y subcategorías.
Previo a interpretar y analizar los resultados obtenidos a través de las entrevistas, se puede pensar que la mayoría de países del mundo por conveniencia, estrategia, miedo u otras condicionantes, desean tener buenas y sólidas relaciones político-diplomáticas con Estados Unidos desde que al final de la Guerra Fría en el siglo XX, se convirtiera en la potencia hegemónica mundial de manera indiscutida y se afianzará en el área internacional una arquitectura unipolar, que actualmente es rivalizada por la alianza Ruso-China, en una nueva arquitectura multipolar.
Posterior a ese contexto, al entrar en el análisis de por qué se ha percibido desde hace mucho tiempo esa importancia por parte de El Salvador hacia Estados Unidos, los entrevistados responden que la importancia de Estados Unidos para El Salvador radica en dos aspectos elementales relevantes: conveniencia y estrategia. Dentro de estos dos elementos, para algunos podría incluirse el temor y respeto que se le tiene a este país.
Ahora bien, la mayoría de los entrevistados que ven esta subcategoría como muy importante, lo inclinan más a las administraciones gubernamentales anteriores que a la actual, que está demostrando soslayar el hecho del poderío económico, militar y diplomático de Estados Unidos.
Estados Unidos sigue siendo el destino más buscado por los salvadoreños que, por distintas causas, migran de manera irregular. Esos flujos de migración irregular a ese país datan desde hace mucho tiempo, pero que durante el conflicto armado de la década de los 80 se intensificó. Posteriormente, confluyeron otras causas que empujaron a migrar del país a más salvadoreños. Eso generó una realidad actual: aproximadamente 3 millones de salvadoreños están radicados en Estados Unidos, la mayoría en condición irregular.
Lo anterior, lleva a muchos analistas a opinar que este es uno de los factores de más importancia en la relación político-diplomática para El Salvador con Estados Unidos. Este análisis, coincide con algunos de los entrevistados que expresan las siguientes valoraciones:
Sin lugar a dudas, para los actores claves entrevistados, si algo mantiene o debería mantener a El Salvador trabajando en el mantenimiento de las relaciones político-diplomáticas con Estados Unidos, es el tema migratorio.
La cooperación internacional, si bien es cierto ha sido una variable constante y de conveniencia para El Salvador, en la perspectiva de las personas entrevistadas guarda menos importancia que las subcategorías anteriores. En esa línea, en el tema de cooperación, lo más resaltante en la opinión pública es el FOMILENIO.
Los informantes entrevistados, como se puede observar, sostienen que el tema de la dolarización fue un mecanismo de cooperación y a la vez de dominación por parte de Estados Unidos. Lo cierto es que, a lo largo de los años, Estados Unidos ha apoyado a los gobiernos salvadoreños de turno, que a la vez han apoyado a Estados Unidos a nivel internacional, aplicando muchas veces las directrices que ellos dictan en el área internacional y en la política doméstica.
Esta Categoría que cuenta con el análisis de cinco subcategorías, está directamente vinculado con el objetivo específico relacionado a la definición de las estrategias que han adoptado los Gobiernos de El Salvador.
Esta subcategoría, según el resultado, se percibe que Estados Unidos influyó o trató de influir en la soberanía e independencia de El Salvador en el periodo presidencial del partido FMLN, más que en la administración actual. Según la respuesta a la pregunta (en relación con el gobierno actual) el 57.1% de los entrevistados dijo que no (influye), contra un 28.6 que dijo que sí, y un 14.3% que no lo sabe.
Si analizamos la subcategoría, Estados Unidos con el gobierno del partido FMLN siguió dictando la pauta de algunas acciones de El Salvador en el plano internacional, como por ejemplo en organismos internacionales como la ONU y OEA, y apoyo en maniobras militares de Estados Unidos en ciertas regiones del mundo; como pasó en 2011, cuando el gobierno del expresidente salvadoreño, Mauricio Funes, envió un contingente militar a Afganistán.
La misión duraría un mes y medio, finalizando el 13 de octubre de ese año, pero con opción de prórroga, tal como ocurrió con el Batallón Cuscatlán, que hizo 11 envíos a Iraq para igual número de semestres entre 2003 y 2009, durante la administración del gobierno de ARENA.
De ahí se tuvo respuestas a la siguiente pregunta, ¿cómo consideran la dinámica de las relaciones diplomáticas entre El Salvador y Estados Unidos?
Y con relación a la administración actual, la percepción es que se trata de superar esa etapa de dependencia de los gobiernos anteriores:
Esta subcategoría está muy relacionada con la anterior, teniendo en cuenta que con la llegada de Biden al poder, este presidente en la principal magistratura estadounidense ha condicionado cualquier tipo de ayuda a ciertos parámetros, siendo así para todas las administraciones gubernamentales en El Salvador. Lo anterior, para El Salvador, tiene relación con los problemas estructurales que siempre fueron condicionantes de la necesidad de fondos: desempleo, estancamiento económico, corrupción, vulnerabilidad medioambiental y migración irregular.
En consonancia con esto, Estados Unidos condiciona su apoyo en estas problemáticas a la implementación de acciones y cambios en políticas públicas como en el caso de FOMILENIO, Asocio para el Crecimiento, apoyo militar durante el conflicto armando, tema migratorio y cooperación financiera por parte de cualquier administración estadounidense. No obstante, a lo anterior, algunos comentarios de las personas entrevistadas giran en torno al hecho que la administración actual de El Salvador no aceptará la imposición de directrices para la aplicación de políticas domésticas, como se lee en la siguiente respuesta:
En esta subcategoría, de igual manera, se percibe que antes de la llegada de Biden a la presidencia estadounidense, Estados Unidos influía de manera decisiva en el momento que El Salvador establecía o rompía relaciones diplomáticas con algún país que considerara su socio o su enemigo. Por ejemplo, en el caso de Cuba, el partido FMLN, estableció relaciones diplomáticas, porque la administración Obama no se iba a oponer, ante el acercamiento que estaba teniendo la nación norteamericana con la isla. Los anteriores gobiernos de ARENA, ante la presión estadounidense no restablecieron relaciones diplomáticas con Cuba.
A pesar de lo anterior, en el marco de una estrategia de política exterior de El Salvador, desafió a Estados Unidos en 2018, al romper relaciones político-diplomáticas con Taiwán y establecerlas con la República Popular China, adversario geoestratégico de Estados Unidos. La administración Bukele continuó esta política, desafiando a Estados Unidos y consolidando las relaciones con este país asiático.
Para los informantes claves entrevistados, China va teniendo una influencia cada vez más grande en El Salvador, al punto de ser un actor que da garantía a El Salvador, ante la posibilidad de un empeoramiento de las relaciones con Estados Unidos.
Los Estados Unidos constituyen el principal socio comercial extrarregional de El Salvador y, en esta lógica, representa un actor muy importante y de peso para El Salvador. Estados Unidos, a través del CAFTA-DR, impuso su voluntad comercial en los países de Centroamérica, y eso es, de alguna manera una forma de dominación económica y también de posibles imposiciones que merman la independencia y soberanía del estado salvadoreño.
A pesar de lo anterior, en el tema comercial, incluso para la actual administración Bukele, que es más desafiante que las anteriores, el tema se vuelve complicado, porque El Salvador no puede competir con sus productos y servicios; y, en consecuencia, el saldo de la balanza comercial es y será siempre negativo para El Salvador. En esa línea, para los entrevistados, ese peso comercial lo observaron principalmente en la administración del partido FMLN.
Pero de manera indirecta, en temas de relaciones comerciales, El Salvador, apegado una serie de preceptos jurídicos comerciales establecidos en TLC, sigue siendo un país con poca independencia en el juego del comercio mundial, en el que Estados Unidos tiene un papel todavía determinante.
Sin embargo, actualmente se está viendo una nueva vía para superar esa situación ante la consolidación de las relaciones comerciales con China, un gigante comercial a nivel mundial que está haciendo una competencia de peso a Estados Unidos. Estas relaciones económicas tienen la posibilidad incluso, de la firma de un acuerdo comercial entre China y El Salvador.
Se considera este sistema como un conjunto de factores que interactúan en un determinado país y en una determinada región, como una estructura resultante de la producción, la distribución, el consumo de servicios y productos. Es entonces, sin lugar a duda, que la mayor intervención e intromisión de Estados Unidos en El Salvador, ante los ojos de los mismos salvadoreños y el mundo, aconteció en la década de los 80, “justificada” en un flujo de cooperación financiera y militar a favor de los gobiernos militares de turno.
Sin embargo, como se ha mencionado, tradicionalmente Estados Unidos ha tenido esa determinación de estructurar sistemas económicos-políticos afines al espejo en que se miran y bajo sus principios. Con relación a los resultados de las personas encuestadas, como tal, no mencionaron de manera literal si Estados Unidos ha “afectado” el sistema económico-político de El Salvador, pero sí dejaron entrever de manera indirecta que han existido influencias negativas.
Por ejemplo, en este argumento el entrevistado hace alusión a la dolarización, como una herramienta de intervención en el sistema económico y político de El Salvador. Cierto es, que la dolarización no sucedió en la actual administración gubernamental, pero su afectación persiste en estos días, al depender de la política monetaria de Estados Unidos, y de las decisiones del Sistema de la Reserva Federal. En ese mismo contexto, desligarse del tema monetario estadounidense, sería un hecho de consecuencias duras en el corto plazo para El Salvador, especialmente para los sectores menos favorecidos.
De esta subcategoría, se puede resaltar el hecho que la dependencia y soberanía no solamente se ve afectada por temas migratorios, militares, de posiciones internacionales u otros; sino también en aspectos menos mencionados mediáticamente como es el tema monetario.
Esta categoría, como la anterior, se relaciona a las posibles afectaciones de la soberanía e independencia del Estado salvadoreño, directamente vinculada con el objetivo específico que busca definir las estrategias que han adoptado los Gobiernos de El Salvador en el periodo analizado. En la categoría se analizaron cinco subcategorías.
Aunque puede ser un elemento menos relevante para algunos entrevistados, para otros es un factor importante para el aprovechamiento y consecución de los objetivos y el interés nacional que la política exterior salvadoreña persigue. Para algunos de los académicos entrevistados, la actual representación diplomática salvadoreña en Estados Unidos requiere de un cambio, en función de un enfoque más estratégico; esto se interpreta en comentarios como el siguiente:
El Salvador y Estados Unidos viven actualmente uno de los peores distanciamientos diplomáticos y económicos de su historia reciente, mayor incluso que cuando partidos de izquierda llevaban el poder en el país centroamericano. Recientes enfrentamientos entre el presidente Nayib Bukele y el gobierno de Joe Biden han reducido la cooperación estadounidense con las instituciones oficiales a mínimos históricos desde el regreso de la democracia en El Salvador en 1992 y ambos países han cruzado fuertes cuestionamientos que hasta hace poco eran impensables.
Esta situación no está oculta para la población de ambos países, especialmente para la salvadoreña. El tradicional aliado de El Salvador está cambiando el rumbo en las relaciones con la administración Bukele. Este contexto se percibe por parte de los actores claves en esta investigación, y al respecto consideran, que, para mejorar las condiciones en la relación con Estados Unidos, aprovechar la consecución de los intereses y objetivos de interés nacional, debe buscarse un escenario bilateral de diálogo y cooperación, superando las acciones de discrepancias y confrontación que en la actualidad existen.
Los comentarios apuntan a eliminar o por lo menos minimizar, por parte de El Salvador, la confrontación con Estados Unidos y enmarcarse en un proceso de supuesto alineamiento pacífico en la relación bilateral, lo cual no parece que sea el interés del actual gobierno salvadoreño.
Tanto con la llegada de Bukele y Biden al poder a El Salvador y Estados Unidos, respectivamente, trajo un cambio en el manejo de la política exterior bilateral por ambas administraciones. La política exterior se fue percibiendo afectada en función del uno y el otro; es decir, cuando llegó el Presidente Bukele al poder, la relación de amistad con Estados Unidos se mantuvo por la figura y coincidencia de posiciones con Donald Trump. Sin embargo, la llegada de Biden con un nuevo enfoque de política exterior para las distintas zonas del mundo, El Salvador tuvo que rediseñar su acercamiento con Estados Unidos. En ese sentido, para que haya un cambio en las relaciones político-diplomáticas entre ambos países, los entrevistados señalan la necesidad de un cambio de gobierno en alguno o en los dos países.
Una de las debilidades de la política exterior, es su carácter de flexibilidad y dependencia de los gobiernos de turno, de ahí que, con los cambios de gobiernos, esta se ve afectada.
Esta subcategoría está bastante relacionada con la tercera categoría, sin embargo, aquí se analizó desde un enfoque de valorar cómo se podrían fortalecer las relaciones político-diplomáticas de El Salvador con Estados Unidos, partiendo del hecho de que, según como se dijo en el análisis de la tercera categoría, Estados Unidos ha tenido intervenciones de manera directa e indirecta en los asuntos internos de El Salvador en todos los terrenos.
Para algunas de las personas encuestadas, uno de los elementos importantes que debería suceder para que se mejoren las relaciones actuales entre El Salvador y Estados Unidos, es no entrometerse Estados Unidos en los asuntos internos de El Salvador, respetando los principios de derecho internacional positivo y consuetudinario, emanado del espíritu de la Carta de San Francisco.
Pocas dudas se pueden abarcar de que el principio de no intervención o el deber de un Estado de no intervenir en los asuntos domésticos de otro, constituye una norma fundamental del derecho internacional y uno de los principios rectores de las relaciones internacionales contemporáneas.
En el derecho internacional que se comenzó a desarrollarse después de la Segunda Guerra Mundial, el principio de no intervención pasó a constituirse en una de las reglas básicas de las relaciones internacionales; aun cuando su cumplimiento haya sido puesto en entredicho en muchas ocasiones. Así lo reconocen la Carta de la OEA y los instrumentos constitutivos de otras organizaciones internacionales.
Dicho principio quedó consagrado en importantes resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas. También la jurisprudencia de la Corte Internacional de Justicia, el órgano judicial principal de la comunidad internacional, ha avalado la no intervención como una norma fundamental del derecho internacional en vigor.
Más allá del análisis que compete a esta investigación, este es un principio universal
que se debe respetar en todas las relaciones internacionales entre dos o más Estados. Se puede interpretar de las respuestas de los actores claves entrevistados que ellos perciben esta premisa de la misma manera, y en este caso particular de la relación de El Salvador y Estados Unidos.
Otra subcategoría importante a la cual de manera directa e indirecta hicieron alusión los entrevistados es el desarrollo e implementación de una agenda de cooperación bilateral. Con dicha ruta de cooperación, se abriría paso a una mejor relación de las relaciones político-diplomáticas.
Para los entrevistados, en consonancia con su discurso conciliador, la definición de una agenda con objetivos y puntos comunes que dé un mejor empuje y dirección a las relaciones político-diplomáticas, es una acción que urge en la actualidad y para futuros escenarios.
Además del estudio realizado en cada una de las categorías y subcategorías, donde se han abarcado todos aquellos aspectos que nos permiten llegar a conclusiones en correspondencia al tema investigado, el análisis de la independencia y soberanía va más allá de acciones y posición internacional. Decisiones políticas y militares a nivel internacional, se ven afectadas por otros factores que se pueden tornar difíciles de controlar por El Salvador.
Esta última interpretación es importante. No obstante, no se puede obviar que los actores claves entrevistados, como parte de una sociedad como la salvadoreña, tienen sus posiciones políticas-ideológicas, y lógicamente estas intervienen en sus procesos deliberativos y de percepción ante los distintos sucesos de las relaciones bilaterales, realidad económica, política, social e histórica.
En cuanto a la dinámica de la política exterior con los Estados Unidos, puede concluirse, que en el gobierno del partido FMLN del período 2014-2019, se mantuvo “estable” y con pocas diferencias en cuanto a las administraciones anteriores del partico ARENA. Se conservaron las mismas políticas en el tema migratorio, tema de cooperación a través de proyectos como el FOMILENIO, sin mostrar, como todos esperaban, discrepancias o confrontaciones políticas entre ambas naciones; al contrario, la administración 2014-2019 fue considerada por la mayoría de los informantes claves entrevistados como no confrontativa a la política exterior e internacional estadounidense.
Solo salió de esta relación, la decisión del gobierno del partido FMLN en el 2018, finales del mandato, de romper las relaciones diplomáticas con la República de China (Taiwán) e iniciar las relaciones diplomáticas-político-económicas con la República Popular China. Se puede considerar como el único aspecto que puso entredicho los protocolos de estabilidad y dependencia de los Estados Unidos.
Con relación a la administración actual, según lo analizado en la revisión bibliográfica y codificación abierta de los resultados obtenidos, la mayoría de los entrevistados dieron a conocer que había habido un giro de la política exterior de El Salvador con Estados Unidos, producto de las discrepancias en las relaciones de la administración Biden con el gobierno de Bukele. El gobierno salvadoreño ha optado por una visión geopolítica donde entra en el escenario otros países de gran peso en la esfera internacional, como China, país con el cual se han estrechado lazos, que en cierta medida disminuyen la influencia estadounidense en El Salvador.
Asimismo, el Gobierno salvadoreño, del periodo de 2019-2024, tiene como objetivo directivo defender el interés nacional en sus decisiones internas. Sin dejar fuera del análisis que, si bien la administración actual no ha aceptado la intervención de los Estados Unidos en sus decisiones institucionales, política interna, procesos económicos y acciones para convertir el país como atractivo para la inversión, existen procesos que se consideran también como prioritarios en la relación bilateral, como la migración y la dependencia del dólar como moneda de circulación.
Con relación al tema migratorio, siendo una realidad la existencia de un aproximado de 3 millones de salvadoreños radicados en Estados Unidos, la mayoría en condición irregular vuelve este tema como uno de los factores más importantes de la relación político-diplomática-económica, lo cual, según los actores entrevistados, debería tenerse en cuenta a la hora de definir las relaciones político-diplomáticas con Estados Unidos.
En cuanto a la afectación de la soberanía e independencia del estado salvadoreño por Estados Unidos, se establecieron las subcategorías relacionadas con el tema de posicionamiento internacional, concluyendo en cuanto al análisis de las entrevistas, donde se realizó la pregunta sobre si percibieron que Estados Unidos afectó la soberanía e independencia de El Salvador en el período presidencial 2014-2019. Se obtuvo como respuesta (de parte de los 15 entrevistados) a la pregunta, que un 64,3 % contra un 35,7 %, manifestó que se había mantenido la soberanía del Estado salvadoreño a pesar del accionar estadounidense.
En cuanto a la percepción que tuvieron los actores claves entrevistados con respecto a que, si consideran que el Estado salvadoreño en la actual administración presidencial está siendo afectado o incidido en su soberanía e independencia por Estados Unidos, manifestaron en un 57.1 % que no, contra un 28.6 % que sí, y un 14.3 % que tal vez.
Destacamos que, si bien estas respuestas están presentes en todos los discursos examinados y que incluye todas las categorías y subcategorías analizadas, llevan a concluir que debido a la dinámica, escenarios, resultados y estrategias que se han visto envueltas en las gestiones presidenciales del período temporalmente delimitado, se ha mantenido esa independencia y soberanía en el posicionamiento internacional, decisiones políticas a nivel geopolítico y decisiones institucionales. Mientras existen otros factores que podrían ser más difíciles de controlar y que se deben elaborar estrategias planificadas para encontrar soluciones a mediano plazo, como es el caso del intercambio bilateral.
Es importante mencionar, que, si bien se realizó un estudio exhaustivo cualitativo para llegar a tesis lo más objetivas del tema analizado, hay que considerar que no se puede obviar por parte de las respuestas de los actores entrevistados posiciones ideológicas donde intervienen procesos deliberativos de percepción entre los distintos sucesos de la realidad política, económica, social, histórica, cultural, entre otros.
Las acciones de política interna tienen repercusión en la política exterior de El Salvador, principalmente con aquellos países que defienden los llamados sistemas democráticos de estilo occidental, pregonando reglas en las maneras de gobernar que después no cumplen.
En consonancia con lo anterior, mencionamos el tema en estudio, y, como caso particular, de Estados Unidos, país que condena muchas de las acciones que El Salvador ha ejecutado —en particular la destitución de los magistrados, la implementación del estado de excepción, y la implementación del Bitcoin como moneda de curso legal en El Salvador—, llevando al debilitamiento de las relaciones bilaterales entre los dos países.
El estado de El Salvador con las acciones implementadas ha puesto de manifiesto la soberanía e impuesto autoridad de implementar acciones legitimadas por sus tres poderes, lo cual va más allá de la aceptación de un tercer país, en este caso Estados Unidos. El gobierno del Presidente Nayib Bukele se ha caracterizado por no verse influenciado por los países que tradicionalmente han influido, siendo el caso de Estados Unidos, que permanentemente ha marcado la agenda política y de desarrollo de El Salvador.
Este accionar, si bien le da soberanía a El Salvador, tiene consecuencias en la esfera bilateral y multilateral. A nivel bilateral, el efecto principal es el rechazo por parte de Estados Unidos con relación a las acciones que el Gobierno de El Salvador ha tomado en su política interna. Con estas acciones, se observa un detrimento en la cooperación para el desarrollo y el cambio estadounidense en favor de organizaciones no públicas, sino privadas. Asimismo, la posibilidad de exclusión de El Salvador de los procesos deliberativos en espacios multilaterales; disminución o nula cooperación migratoria a los salvadoreños residentes en El Salvador; represalias contra figuras políticas de la actual administración de El Salvador, redoble de esfuerzos de investigación como supuesta corrupción en la actual administración, disminución en los flujos comerciales y posibilidad de exclusión del Tratado de Libre Comercio CAFTA-DR.
Finalmente, consideramos que el rompimiento de la administración Bukele del tradicional paradigma político, económico, cultural y social que imperó en las relaciones bilaterales Estados Unidos/El Salvador, en detrimento de su soberanía e independencia, para otros, representa un contexto de deterioro del Estado de Derecho y supone posiciones a favor o en contra de las relaciones internacionales del actual gobierno salvadoreño.
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AUTHOR
Author –
* Armando Briñis Zambrano, Doctor en Ciencias Históricas. Director de Investigaciones de la Universidad Luterana Salvadoreña. Director del Centro de Investigaciones Científicas del Consejo Nacional de Rectores de El Salvador (CIC-CONARES).
ORCID: https://orcid.org/0000-0003-4351-0388
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